La Revista de Comunicación difunde un estudio sobre los rostros y frases de grandes pensadores que los internautas retoman , a través de la sátira, la ironía y la exageración en las redes sociales.
Por Tania Elías. 26 abril, 2017.
“Humorismo como creación y fortalecimiento de los vínculos en la sociedad red: el caso de los memes sobre filósofos” es el título del estudio que presenta Violeta Alarcón, máster en Análisis Sociocultural del Conocimiento y la Comunicación, en el volumen XVI de la Revista de Comunicación.
La especialista reconoce el carácter humorístico y cómico de los memes, los cuales poseen sus propios códigos de interpretación dentro de la comunidad virtual.
“Internet no es solo un instrumento, sino que es un medio para todo, que permite desarrollar la sociabilidad, pero no cambia los comportamientos; por ejemplo, los chistes han sido siempre los mismos, los comportamientos “se apropian” de Internet, por lo que amplían sus posibilidades y las refuerzan. En Internet se articula la sociedad red, pues se trata de un medio de comunicación, interacción y organización social, los memes, en especial desde su perspectiva humorística, juegan un papel relevante para dicha sociabilización”, menciona la autora.
Entre los elementos que considera en el análisis figura el juego del lenguaje universal como el que se suele observar en las redes cuando se difunde la imagen del filósofo Inmanuel Kant, acompañada de la frase “I Kant Understand what you´re trying to say”. “I Kant” se asocia a la figura del pensador, pero adquiere otro tono con el significado de “I can´t” (No puedo).
“Emplear este tipo de imágenes puede suponer también una parodia de la fórmula recurrente heredera de la tradición enciclopédica, de colocar junto a la biografía, citas, ideas, obras, etc. de un personaje, su retrato”, refiere la autora.
La parodia del lenguaje filosófico es otro factor utilizado, aunque se deja claro que en algunos casos es necesario conocer el contexto histórico del pensador o de la época en la cual vive. Se expone entre otras, una imagen del ruso Kropotkin frivolizando la conocida vindicación de su obra “La conquista del pan”, en la que exigía los derechos de las clases explotadas. Mientras se queja de que muere de hambre, una voz le dice “Piotr no podemos poner eso”, ante lo que el pensador plantea una frase más elaborada: “Ya, entonces pon: Pan, la revolución necesita pan, nuestra tarea será que a ningún hombre le falte un pan”.
La filosofía y cultura de masas también se evalúa como elemento. En este caso, la autora analiza un meme que se difunde en las redes, el cual se compone de dos imágenes: la del héroe He Man (protagonista de una conocida serie transmitida en América Latina, en 1980), con la del pensador francés Michel Foucault. Mientras el primero mira su espada y evoca su célebre frase: “Yo tengo el poder”, el segundo le aclara: “El poder no se posee, muchacho, se ejerce”.
“Los memes no inventan nada, sus estructuras repiten fórmulas tradicionales: el collage, la sátira, el chiste, la parodia, la caricatura, la viñeta, el juego de palabras, el absurdo, etc. Reírse de un chiste supone participar de la cultura en la que éste se inscribe, pero esto no supone la ausencia de crítica. El humor puede tanto hacer caer estructuras culturales, como reforzar los clichés que la sociedad red hace incluso más globales. La ambivalencia de la risa supone unir a una comunidad en torno a la desacralización de los símbolos, descabezando a través de fórmulas simples, como los memes, los esquemas rígidos y jerárquicos de la sociedad”, refiere la autora.
La Revista de Comunicación en la que aparece el artículo de la máster Violeta Alarcón, es la publicación académica, sin fines de lucro, de la Facultad de Comunicación, de la Universidad de Piura. Difunde investigación en el ámbito de la comunicación, desde el 2002. Está indexada en Latindex, Rebiun, Redib, Dialnet y Ebsco. En este momento está abierta la convocatoria para la segunda edición del 2017, a publicarse en setiembre.
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